lunes, 27 de octubre de 2008

Un viaje

La mente se aclara en los lugares más insospechados. A veces en el tumulto pegajoso de la vuelta a casa, en el bus, por las tardes... a veces ese tumulto parece ser el coro de consejeros anónimos que ofrecen la más sincera ayuda. A veces la mente cobra lucidez y entiende que lo que se debe hacer es aquello que se debe hacer, no hay más que escuchar el silencio camuflado y mirar por el pequeño rectángulo de ventana que sobrevive a toda clase de auto adhesivos tarifarios.
Hoy viajé de un punto a otro con la cabeza pegada al vidrio, con los anteojos puestos, mirando la muralla de la autopista. Escuchando las mismas canciones de siempre, con la misma ropa de siempre. A veces la vida es tan obvia y majadera.

Sinceramente hay ocasiones en que no tengo ganas de bajarme de esa micro, nunca, jamás, de los jamaces..

viernes, 3 de octubre de 2008

El figurante borroso


-A veces esa suprarealidad emerge de las profundidades de lo evidente, sabes?-

-Ah, por supuesto, claro que no se puede confiar en la suerte para poder toparse con uno de esos maravillosos momentos, creo que hay que estar en constante vigilia, no crees tú?-

(guarda silencio y no contesta nada, mirando hacia el frente)

-Porque de qué otra forma puede uno aferrarse a esa realidad, sabes... esta vida es como una costra que jamas ha de caer, la carne viva permanece oculta, y con ella, ocultos también quedan los misterios más hermosos, más vívidos... más...

(es interrumpido por su interlocutor que siempre mira en la misma dirección)

-Te lo perdiste otra vez, Maurice. Acaba de pasar por tu lado y te lo perdiste. Debes prestar menos atención a tus pensamientos, Maurice. Debes prestarle más atención a tu alrededor; y, menos a tratar de entenderlo. Esperemos a ver si pasa de nuevo.

-Está bien, pero avísame para la próxima ocasión que se presente-

-No, debes verlo por ti mismo. Creo que no lograrás verlo si lo anuncio, ahora pon atención-